Que sentimientos más contrapuestos he tenido esta tarde. Por un lado comencé expectación por ver que si se podía repetir, que se repitió, el desastre de hace unos días.
Un torero “atacado”, que no tenia nada claro… el susto en el cuerpo y con tanta tensión es imposible, o por lo menos muy difícil ver algo.
Como hace unos días indignado de ver como en este mundo del toreo, en el que intuyes lo complicado que es poder llegar a torear en la primera plaza del mundo y demostrar el arte y valor que tiene cada uno. Como decía indignado porque son muchos los que quieren llegar y no pueden, y se dejan muchas cosas en el camino. Y otros tiene la maravillosa opción y no pueden, o no quieren aprovecharla.
El mal sabor de la primera tarde de Julio Aparicio esta “San Isidrada”, parecía que no iba a quitármelo esta segunda, la venteaba de feria, y así fue de lo nefasto de la tarde no quiero acordarme ya, pero hay una cosa que me toco en lo mas hondo. LA VERGÜENZA TORERA, no se si vendría con alguna intención "si la cosa no salia", o fue en arrebato, como los que le he visto alguna vez delante de "el de las patas negras", pero como otras veces me pareció un GRAN TORERO que minutos antes me daba pena.
El año pasado un Juan Pedro casi se lleva por delante a Julio Aparicio, gracias a ... no fue así. Pero OPÍPARO, que así se llamaba el jabonero creo se llevo su alma, la esencia de este torero, que para mi siempre tuvo ese sabor especial.
TORERO, Julio aunque no fuese esta tu tarde y el público no se enterase de quien se iba.
Gracias Julio.
Un aficionado.
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| Momento en que se "el Fandi" le corta la coleta. |
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