ELIGE TU LENGUA.

Mas vale perder un año de vida, que la vida en un año.

Este iba a ser un año un tanto especial para mi, mi cambio laboral me dejaba muchas posibilidades para disfrutar "a tope" de la temporada cinegética y de todos los concursos de perros de muestra a los que fuese invitado a juzgar.  
Pues bueno la temporada de caza ha sido atípica, he podido, vamos, hemos podido (cazo siempre con mis hermanos) disfrutarla en parte... La limitación perimetral de la Comunidad Valenciana me ha dejado sin una parte importante de mi actividad cinegética. Las noches de luna en el Delta del Ebro.

DE LO LUNATICO QUE SOY VOY A RELATAR UN POCO

Hace treinta años, uno arriba o abajo, un día Manolo Segarra me dijo si quería cazar una noche de patos en el arrozal. Fue mi perdición, o mi bendición, nunca se sabe...jaja. 
En un "acebat", sentado en una "choca" preparada en el "cordo", una noche de calma total fue, mi primer Coll vert, bendito pato en que hora llegaste...

Desde entonces varios años con Javi Sancho, probando cotos,  con algún acierto y muchos fracasos. Y deje de cazar la noche de acuáticas.
Hace trece años  me invito mi amigo Julio Rodríguez, entonces presidente del CEDD, Club Español del Deutsch Drahthaar. A la monográfica del Club a celebrarse aquí cerca en Amposta y en L'encanysada del Delta. Volver a estar cerca del mundo de las acuáticas me reencendió, donde hubo fuego siempre quedan rescoldos.
Hablando con "Calamaro" Enrique Morales, que organizo de manera excelente la prueba para el CEDD, y su hermano Kiko, salió el tema de las noches de luna.... comenzaba las andanzas un un nuevo coto de acuaticas.

Y después de once años con todas sus lunas (parece una canción de Sabina), cazando con Quique, este ha sido el primero que no he podido asistir. Podemos porque mi hermano Pau ya tiene la ribera en la sangre.
A pocos días de la última luna, la de febrero, sigo pensando en esas noches viendo la luna, oyendo el viento y esperando las siluetas que te sorprendan, las noches de concierto, los días de calma: el Delta por la noche es casi tan increíble como durante el día.

Con mi hermano ya preparamos la próxima temporada, esta no ha podido ser y con los compañeros de la finca, el año que viene será, estaremos todos y podremos comentar y mentir sobre nuestros lances, los ocurridos y los deseados.

Un año sin acuáticas, pero un año de vida.